Pacaya Samiria: La Selva de los Espejos que esconde el corazón de la Amazonía peruana

¿Alguna vez ha soñado con un lugar donde el cielo se refleja en el río y el silencio de la selva solo es interrumpido por el canto de las aves y el murmullo de la vida salvaje? Ese lugar existe y se llama Reserva Nacional Pacaya Samiria, un vasto humedal en la Amazonía peruana que, por sus aguas negras, recibe el sobrenombre de «La Selva de los Espejos». En este post, lo invitamos a descubrir por qué esta reserva es mucho más que un destino turístico: es un tesoro histórico y natural de importancia mundial.

De la protección del Paiche a la gran reserva

La historia de Pacaya Samiria es fascinante. Todo comenzó en 1940, cuando el gobierno peruano declaró la zona reservada con un objetivo muy claro: proteger al paiche (Arapaima gigas), el pez de agua dulce más grande del mundo. Esta iniciativa, una de las primeras en la Amazonía, sentó las bases para lo que vendría después. Con el tiempo, se reconoció la importancia de un ecosistema completo y la necesidad de proteger a otras especies como el caimán negro y el lobo de río. Así, en 1972, se estableció la Reserva Nacional, que se amplió en 1982 hasta alcanzar sus impresionantes 2.080.000 hectáreas, convirtiéndose en la reserva nacional más grande del Perú.

Un santuario de flora y ecosistemas únicos

La RNPSA es un Sitio Ramsar (humedal de importancia internacional) por una buena razón. Sus ecosistemas son esenciales para la vida de miles de especies y para la salud del planeta. Los aguajales, pantanos de palmeras que cubren un 15% del territorio, son cruciales por sus turberas que almacenan una gran cantidad de carbono, ayudando a mitigar el cambio climático. Estos bosques se complementan con las restingas (áreas no inundables) que sirven de refugio para la fauna terrestre durante las crecidas, y las tahuampas, los bosques inundables que dan forma al paisaje.

Pacaya Samiria es un lugar donde el pasado de la conservación y la riqueza natural se unen en una experiencia inolvidable. Su historia de protección, sus vastos ecosistemas y la imponente belleza de su paisaje son la base de lo que hoy ofrecemos como tour operador. En el próximo post, profundizaremos en los animales que hacen de este lugar un verdadero paraíso de biodiversidad.